PATATAS A LA BÚLGARA
La cocina búlgara es muy poco conocida y, sin embrago pro el cruce de influencias culturales- turcas, griegas, eslavas, balcánicas- es muy interesante. Mi amigo Ivan, cuando viene aquí con sus provisiones de Bulgaria, siempre hace esta receta, sencilla pero sabrosa. Él lo llama “patatnik”, i pertenece a la cocina más pobre de las montañas, en dónde las patatas venidas de América se aclimataron y salvaron del hambre a la población
Me dice que esta receta del Patatnik procede del monasterio de Bachkovo en la montaña que se llama Rodopi (Rodop en turco), que llega hasta Grecia, que ocupa una parte del territorio. Esta montaña es famosa por sus reservas hídricas. su paisaje, sus restos tracios, y sus monasterios..y el cultivo del tabaco, como en Andorra.. La receta es muy especial para la gente de esta región, por los recuerdos, seguramente, de las hambrunas que salvó. La receta se había pasado de una generación a la siguiente generación hasta los días presentes. Puedo decir que esta comida se come principalmente solo en esta parte del país y no es tan conocida en otras partes. El Patatnik se come siempre caliente y se puede incluir en un menú como un aperitivo o ahora como una guarnición; originariamente, era un desayuno. Como otras comidas tradicionales, esta también tiene dos o más modos de preparación.
Los montes Rodopes, es una zona muy interesante, con particularidades nacionales y lingüisticas, de hecho formó parte de la Rumelia independiente-. Hay restos de la población sakatsani, de origen griego, un pasado tracio y los pomaks, islámicos búlgaros restos de la islamización forzada y violenta practicada por los otomanos que ocupaban el país a partir del siglo XVI. Los pomak constituyen un grupo nacional, que se extiende por Bulgaria, Macedonia, Grecia, Turquía, Albania…El origen del nombre de este pueblo es un misterio, peor es ilustrativa la teoría (quizá poco científica, pero reveladora) de que el nombre viene del turco ”poturnjak”, que quiere decir turquizar, de una palabra que significa garrote o porra…Catalanes, vascos y gallegos, conocemos bien este fenómeno, que también hemos vivido.
En Irlanda, en Francia, en Occitania, hay recetas parecidas que en la cocina francesa, de forma más sofisticada se suele llamar gratín, como el Gratin dauphinois. En todos los casos se incluyen patatas, queso y productos lácticos y, en algún caso, huevos.
Ingredientes:
10 patatas, mejor rojas (casi 1 kg)
200 gr de queso búlgaro (blanco; sirene o feta)
100 gr de queso suizo, francés, holandés tipo Gruyère, Emmenthal, Gouda, Edam..…)
2 cucharadas de aceite de oliva o de girasol
1 cebolla
2 cucharadas de mantequilla
5 dientes de ajo
Perejil
Elaboración
Las patatas se pelan y se cortan a rodajas finas o a trocitos.
Después las patatas se mezclan con los dos tipos de queso, rotos en un piezas muy pequeñas, la cebolla cortada, el ajo picado, el perejil, el aceite de oliva y la mantequilla en un recipiente profundo
Luego todos los productos se mezclan y se ponen en una bandeja para horno rectangular o circular
La bandeja se pone en un horno a temperatura media (180º), previamente encendido, unos 30 minutos.
Después de 30 minutos se pone agua en la bandeja y la dejamos en el horno 10 minutos más.
Notas
Hay variantes de preparación de esta comida menos ingredientes y más especies. Resulta deliciosamente perfumada. Se añade cebolla trinchada, 2 p 3 huevos, pimienta , tomillo, eneldo, orégano, etc.